Estar embarazada no impide de ninguna de las maneras que seas capaz de realizar tu vida con total normalidad. Siempre que no te llames Kylie Jenner, claro, que en ese caso al querer mantener en secreto que estás esperando un hijo te las tienes que ingeniar para cumplir tus compromisos sin descubrir el pastel antes de tiempo. Eso hizo recientemente cuando la vimos posar con una colcha cubriéndose la tripa para promocionar la nueva línea de ropa interior de Calvin Klein. Que sí, que el resto de Kardashian estaban a su lado enseñando todo lo que ella no, pero el concepto falla. Quizás no sería mala idea que la pequeña Kardashian se fijara más en la estrategia que ha seguido Kirsten Dunst, que también ha guardado silencio sobre su primer embarazo y que ahora acaba de confirmarlo a lo grande protagonizando una preciosa campaña publicitaria de Rodarte. Mata así la actriz dos pájaros de un tiro: por un lado consigue que le salga gratis la producción de la foto con la que anuncia la feliz noticia al más puro estilo Beyoncé, y por otro ingresa una buena cantidad en el banco sin necesidad de tener que vender la exclusiva a ninguna revista. Algo que entraría en conflicto con su deseo de no convertir su vida privada en un circo mediático. Las fotos, que por cierto podrían pasar por el cartel de cualquier película suya dirigida por Sofia Coppola, forman parte de la campaña de otoño/invierno de la firma creada por las hermanas Kate y Laura Mulleavy, que se han apuntado un buen tanto logrando que Kirsten, que espera a su primer hijo fruto de la relación con su prometido Jesse Plemons, haya confiado en ellas para dar este paso.